Por: Pedro René Almonte
El ciudadano dominicano contemporáneo, vive el presente de manera agitada, sin mirar atrás y a veces ni hacia los lados mira. Con un mundo tan interconectado y globalizado a veces estamos más pendiente con lo que pasa en El Salvador, y perdemos de vista la realidad e infravaloramos lo que tenemos y lo que somos los dominicanos. En ocasiones cuando las cosas no salen como las imaginamos o pensamos, nos embarga el pesimismo y la derrota nos empieza a rondar el cerebro; olvidando todo lo que hemos pasado para llegar a ser lo que somos, y otros ignorando todo eso por falta de conocimiento. El pasado es parte de nuestras vidas como dominicanos, pero no puede ser parte de nuestro presente y mucho menos de nuestro futuro. Es imposible construir el futuro de nuestra nación con lo que pertenece al pasado. Fuimos colonizados, nuestros ancestros exterminados (episodio superado); fuimos conquistados e invadidos (España, Haití, USA) (episodio superado); Los Trinitarios lograron independizarnos de Haití y de toda potencia extranjera (episodio superado); luchamos la guerra de abril (episodio superado), ajusticiamos al tirano (episodio superado). En fin, para ser la sociedad que somos hoy, llámela como usted quiera: injusta, incompleta, desigual, inconclusa; pero es la nuestra, es lo que somos, es la que hemos construido y es el único entorno social donde no seremos nunca un extraño. ¡Somos República Dominicana!
Por tanto , el pueblo dominicano sabe lo que nos ha costado ser lo que hoy somos , mucha sangre , mucho sudor y muchas lágrimas ; en consecuencia se ha opuesto (el pueblo) de manera tajante y decisiva , al caos , a la anarquía y al desasosiego ; esto se pudo notar de manera tal que , mientras los seguidores de Leonel evidentemente pagaban a “motoconchistas constitucionalistas” con haitianos incluidos , el verdadero pueblo estaba yendo a sus trabajos o sus universidades para hacer de este país un lugar mejor para todos .
De tal manera que, el pueblo dominicano, no está dispuesto a volver atrás, a volver al pasado, a volver a Leonel Fernández; como dije y me reafirmo es una idea hasta descabellada pensar que el pasado puede construir nuestro futuro. ¡Es imposible!
Hay que detenerse a pensar un momento, y con la cabeza fría reflexionar en lo que dijo hace un tiempo nuestro presidente: “Ya no somos el paisito que éramos en el pasado”. Mire a su alrededor e imagínese el pasado reciente… ¡Danilo tiene razón!
¡Dominicanos, ni un paso atrás ya lo pasado ha pasado!
¡Algún día llegará el verano!
