Santo Domingo. – La encuesta Greenberg reveló que, si las elecciones fueran hoy, el candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno -PRM-, Luis Abinader, obtendría el 52% del voto preferencial en una primera vuelta electoral durante las elecciones del 17 de mayo, seguido del candidato del Partido de la Liberación Dominicana -PLD-, Gonzalo Castillo, con un 24% de los votos y el expresidente Leonel Fernández con un 17%.
El sondeo, realizado entre el 21 y el 24 de febrero, una semana después de la suspensión de las elecciones municipales, también refleja que la intención de voto a Abinader supera con holgura a la de Castillo en una hipotética segunda vuelta.
En ese escenario, el perremeísta obtendría el 68 % de los votos, mientras que el candidato oficialista recibiría el 27 % de los sufragios.
La encuesta se realizó en todo el país, con entrevistas a 1,029 electores, y tiene un margen de error de entre 3.1 y 3.7 puntos porcentuales, a intervalos de confianza del 95 por ciento.
El sondeo fue realizado a nivel nacional, con una muestra de 1,029 electores, el cual arrojó un margen de error de entre 3.1 y 3.7 puntos porcentuales, a intervalos de confianza del 95 por ciento, dejando claro que en una posible segunda vuelta el líder opositor alcanzaría el 68% de los votos.
Los resultados de la encuesta de Diario Libre son similares a un sondeo divulgado por Noticias SIN en la noche del martes, que coloca a Abinader como claro favorito.
Este sondeo, elaborado por la firma Mark Penn Stagwell en cuatro ciudades, concede a Abinader una horquilla de entre el 45 % y el 50 % de voto, dependiendo de la urbe (Distrito Nacional, Santo Domingo Este, Santiago e Higüey).
En cambio, el candidato peledeísta tendría entre el 20 % y el 25 % y Fernández, de la Fuerza del Pueblo (FP), del 8 % al 15 %, según ese sondeo, cuyos datos técnicos no fueron informados por la emisora.
Ambas encuestas fueron realizadas en momentos en los que la anulación de las elecciones municipales llevó a miles de personas a protestar a diario frente a la sede de la Junta Central Electoral (JCE) para pedir explicaciones de lo ocurrido y garantías de que las próximas elecciones sean limpias.
