Santo Domingo. – Soy Julián Alonso Rivas Amézquita, nacido en La Vega, República Dominicana, dirigente del Partido Nacional de Voluntad Ciudadana (PNVC) donde ocupo la función de Secretario Nacional de Organización y miembro del Comité Político. Quiero por este y cualquier otro medio posible denunciar las amenazas de las que estoy siendo objeto por parte del Diputado al Parlamento Centroamericano (PARLACEN) Juan Alberto Cohen Sander y Ramfis Trujillo nieto del sanguinario dictador Rafael Leónidas Trujillo.
Estas amenazas se deben a que hemos denunciado el desfalco cometido por Juan Cohen con más de $50 millones de pesos entregado por la JCE al PNVC. A raíz de esto estamos en litis judicial y esta litis tiene parada la candidatura presidencial de Ramfis Trujillo que no podrá aspirar porque este próximo Domingo 27 de octubre vence el plazo de las proclamaciones convenciones para proclamar candidatos presidenciales y nuestra audiencia en el Tribunal Superior Electoral está fijada para el lunes 18 de noviembre. Esta acción deja al nieto del dictador Trujillo fuera del escenario del 2020, de ahí vienen las amenazas contra nuestra persona al estilo dictatorial y despótico de su abuelo.
La Cámara de Cuentas de la Republica Dominicana tiene conocimiento de la malversación de fondos en el PNVC realizada por su presidente Juan Cohen ya que estos realizan una investigación desde hace más de un año y la Cámara de Cuentas nos ha entregado un informe provisional que no puede ser divulgado hasta que no se haga definitivo y sea autorizada su publicación.
También responsabilizo al Presidente de la Junta Central Electoral, Julio César Castaños Guzmán como cómplice, porque a pesar de tener pleno conocimientos de la corrupción de Juan Cohen con los fondos del PNVC, nunca ha hecho nada para detener el desfalco, sino todo lo contrario, lo respalda enviando como inspector a una Asamblea irregular al hijo de Adolfo Salomón, a quien se le dieron instrucciones de beneficiar a Juan Cohen realizando un informe lleno de falsedad omitiendo la realidad y reconociendo un padrón alterado, diferente al padrón oficial del PNVC que reposa desde hace más de un año en la JCE y que fue presentado por la Secretaria Nacional de Organización del PNVC, cumpliendo con lo que establecen los Estatutos del partido en su artículo número 27.
Nuestra denuncia la hacemos con toda responsabilidad, por sí logran cometer cualquier hecho en nuestra contra o en contra de cualquiera de los dirigentes qué pertenecen del PNVC. Por igual llamamos a los derechos humanos de RD y USA, ya que soy un hombre totalmente transparente sin ningún problema con la justicia, ni con ningún organismo de seguridad en RD o en otra parte del mundo.
Mis compañeros, amigos y familiares son testigos de que en los últimos tiempos estoy viajando sin equipaje por los aeropuertos para qué no puedan poner sustancias ilícitas en mi equipaje ni hacerme ninguna trama con el fin de eliminarme moralmente y así yo no pueda continuar con esta lucha en contra de la corrupción de los qué pretenden apoderarse del poder en RD, robándose un partido que para llevar una candidatura presidencia ilegal e improcedente.
El señor Ramfis Trujillo le ha pagado 72 millones de Pesos a Juan Cohen por la compra total del PNVC, no sabiendo que esto no es una empresa y que los partidos son patrimonio del pueblo dominicano y de sus militantes, no de grupos mafiosos como los que representan Cohen y el nieto de Trujillo.
