Cibaeños Constitucionalistas …
Este hecho (La Reelección Presidencial) visto pura y simplemente parece viable dada la tradición maniquea que se ha entronizado en la cultura política dominicana fruto del método dictatorial de gobernar utilizado por casi todos Los gobernantes del patio, desde Pedro Santana hasta El Doctor Joaquín Balaguer. Esto ha sido posible a expensas del bajo desarrollo político que ha permitido el tipo de relación económica impuesta principalmente por Rafael Leonidas Trujillo quien acumuló una fortuna inmensa a costa de monopolizar la producción de productos y servicios (Todas Las Empresas pertenecían al jefe) e incluso la política era ejercida por medio de un Partido Único – Partido Dominicano – por medio del cual se le cobraba un 10% del salario a todos los empleados públicos durante toda la vida. Hasta los que estaban cubierto por pólizas de seguro (Seguros San Rafael, C. Por A.) pagaban las primas, pero los servicios lo cubrían El Estado Dominicano con los hospitales y médicos al servicio de Salud Pública.
Esta situación impuesta de manera prolongada en contra de la población influyo en la Conciencia Colectiva llevando a los individuos a pensar que «todo es posible para el que gobierna». Lo que olvidan los sectores que promueven la reelección es que en la población no solamente influyeron esas contradicciones, sino que también han incidido en la formación cívica de los pobladores de esta media isla una Conciencia Nacionalista alimentada por las poses de esos mismos gobernantes presumiendo de tales valores.
Por lo que concluimos manifestando que el problema no es la reelección, sino LA MODIFICACION A LA CONSTITUCION para permitir una segunda reelección consecutiva para optar por un tercer periodo de gobierno con el fin espurio de satisfacer los caprichos personales de un Jefe de Gobierno que luce agotado; que ha mantenido un índice de aceptación a base de un «crecimiento económico» que ha generado una deuda insostenible y esto que no vamos a mencionar la falta de criterios correctos en la priorización de la inversión. En fin, ese sentimiento nacionalista despertado en el pueblo por las luchas estudiantiles y sindicales, por una guerra patria, por el avivamiento mantenido por Juan Bosch sobre las masas de una relativa moral política aún dentro de su atraso. Esos mismos ciudadanos que como quien suscribe aprobaron una modificación a La Constitución en el año 2016 para evitar el dispendio de los recursos del pueblo en una elección cuyos resultados todos sabíamos.
Ahora decimos: NO SEÑOR PRESIDENTE, DIPUTADOS, SENADORES, EMPRESARIOS «COMPLACIENTES» Y CIUDADANOS DUBITATIVOS Y TEMEROSOS DE PERDER MIGAJAS DE DERECHOS DISFRAZADOS DE PRIVILEGIOS.
LA MODIFICACION A LA CONSTITUCION, AUNQUE SEA PARA CAMBIAR UNA «COMA” …NO PASARA.
