Santo Domingo.- La entidad no partidista de la sociedad civil, Participación Ciudadana (PC), rindió un informe final denominado ¨reporte matutino del monitoreo de los centros de votación¨ sobre sus observaciones en cuanto al proceso de votación de las primarias de los partidos políticos, realizada el domingo 6 de octubre del 2019, en la República Dominicana, dando a conocer algunas de las irregularidades observaciones comprobadas y verificadas de dicho proceso electoral que anticipa las elecciones generales del 2020.
Estableció Participación Ciudadana, como primera irregularidad verificada comprobada en las mesas de votación, que a menos, un 4.85% de los de los 2 millones 254 mil 139 de votantes que acudieron a las urnas, expresó que el comprobante de votación no coincidió con los candidatos elegidos en la pantalla habilitada para esos fines, porcentaje que fue numerado por la entidad en 108 mil 706 personas, de los cuales 93 mil 597 eran del padrón del PLD, o sea para más del 3.5% de los votantes del PLD, su voto no compaginó con la voluntad del votante, concluyendo dicha organización, en que las irregularidades se presentaron en un porcentaje muy superior a la diferencia de votos contados entre los candidatos Gonzalo Castillo y Leonel Fernández Reyna, donde el primero obtuvo según el conteo de la JCE, 911 mil 923 sufragios, contra 885 mil 233 votos del segundo, con una simple diferencia de 26 mil 690 votos a favor del precandidato Gonzalo Castillo.
Una segunda comprobación irregular descrita por el informe, consistió en que, el 51.65% de las mesas de votación cerró a las 4:00 de la tarde, mientras el 48.35% permanecía con votantes, y a esa misma hora la JCE inició la transmisión de los resultados sin informarlo previamente, de donde se desprende que al momento de la JCE, iniciar con los boletines informativos, los cuales envió a la prensa, aún estaban en la mesa en espera de votar el 48.35% de los votantes, lo que hace deducir de las explicaciones del informe, que la proyecciones iniciales dadas a conocer a destiempo, pudo incidir en casi la mitad de los votantes que aún estaban en las urnas y lograron tener acceso por las redes sociales a esa informaciones, pues aun cuando estaba prohibido por resolución el uso de celulares en las urnas.
La JCE no controló la restricción de uso de celulares en las urnas y permitió a los votantes acceder con el celular a los centros de votaciones, lo que representa un hecho gravísimo para la imparcialidad que debió tener la JCE dominicana, que marea el resultado final, lo que fue reconocido también, por la entidad observadora Estadounidense, la Organización Solidaridad Internacional, quien aseguró en su informe, que ese denominado error influyó de manera significantica en la credibilidad de los resultados finales.
También comprobaron los observadores acreditados de participación ciudadana, que en los centros de votación, hubo para los votantes del PLD, compra de cedulas masivas en un 30% de la totalidad de la votación, que traducido a votantes internos del PLD, sumarian 533,146.8 votos.
Este último dato de PC, sumado a la denuncia de fraude realizada por una facción de los pre-candidatos del PLD inconformes con los porcentajes que cada cual obtuvo según la JCE, ciertamente representa la realidad de algunas encuestas, que daban cuenta, de unas diferencias de 35 puntos en favor del precandidato Leonel Fernández Reyna, con relación a su contendor Gonzalo Castillo, pues un simple ejercicio matemático demuestra que, 47,61 % de Fernández, más 30% de compra de cedulas en las urnas, suman 77.61%
Luego del informe de Participación Ciudadana y la entidad Organización Solidaridad Internacional, queda mucho por superar en la República Dominicana y ojala los Estados Unidos, Europa, la OEA y la ONU, ayuden la a salir por buen camino de esta proceso de primarias, señalado como viciado y no solo como viciado, sino como el más lleno de odio, rencor e ingratitud innecesaria de toda la historia racional reciente, donde el poder político y económico del Palacio Nacional, no guardó la forma y se empeñó en pleno gobierno, para obtener un triunfo aparente, que pese a todo ese esfuerzo y despilfarro de dinero, solo pudo visualizar en pantalla de la JCE, 26 mil 690 votos, por encima de su contrincante presidente de su partido de origen, quien se ha declarado como víctima del sistema Electoral y del Estado, pero que según él, aún abatido, sigue expresando que vencerá con lo que ha denominado ¨la fuerza del pueblo¨.
Ahora hay que esperar para ver qué tanta fuerza tiene el pueblo, frente al poder descontrolado, sin límite legal y constitucional del Estado y frente a ciudadanos que se mueven al compás de los vientos económicos, dinero que según expertos electorales, pudieron en tan solo un mes y 20 días, llevar a la cúspide de la candidatura a presidente, a un candidato, informal, sin estilo político y sin ningún mérito histórico, pero sobre todo sin identidad personal, pues el mismo ha confundido su propio nombre con el del presidente Danilo Medina Sánchez, lo que hace reflejar un amor tan grande a sus ejecutorias o una sumisión tan expedita, que el destino final de la República Dominicana será jorderse como siempre lo ha estado.
